¿Quieres volar en ala delta en España? Os ofrecemos realizar esta actividad en diferentes provincias, busca la ubicación más cercana y disfruta de volar como un pájaro.
¿Estás pensando en volar en ala delta en España? Nosotros te contamos todos los detalles que necesitas saber sobre esta actividad.
El ala delta consiste en una estructura recubierta de tela en forma de delta, en el centro de su parte inferior se cuelga el piloto desde donde maneja.
Existen dos modalidades, ala delta con motor y sin motor, se practican ambas disciplinas aunque para volar con pasajero lo habitual es que sea un vuelo con motor. Ya os adelanto que esto es lo habitual, pero todavía hay quien ofrece el vuelo en libre, sin motor. Veamos cómo son cada uno de ellos.
Vuelo en ala delta en España con motor
La aeronave es la misma, ya sea con o sin motor. La diferencia radica en la forma de despegue, al disponer de un motor como ayuda en la propulsión, el despegue lo podremos hacer desde cualquier espacio libre de obstáculos, en algunos casos será desde un aeródromo y en otros desde un terreno en el campo.
Cuando volamos con motor además usamos una estructura metálica que contiene el motor y los asientos. Durante el vuelo iremos cómodamente sentados.
Podremos volar hacia donde queramos, más alto, más cerca del suelo, por encima del pueblo, cerca del rio. El motor nos da esta posibilidad y además nos asegura el tiempo de vuelo independientemente de las condiciones meteorológicas.
Vuelo en ala delta en España sin motor
En esta actividad necesitaremos de una montaña para despegar por lo que lo primero que haremos será subir en el 4x4 o furgoneta hasta arriba.
Una vez arriba el piloto procederá a montar el aeronave y es que el ala delta se pliega para que sea más cómodo transportar y guardar.
Para volar requiere de una zona elevada desde la que poder hacer una carrera y así despegar.
Una vez terminado el proceso de montaje toca despegar, para ello piloto y pasajero van atados y realizan una pequeña carrera juntos.
Un ala delta, aunque no lleva motor se puede mantener en el aire gracias a las corrientes de aire, normalmente ascendentes por la ladera o corrientes de aire caliente también conocido como térmica.
En caso de que no haya sustentación tiende a descender hasta llegar a tierra.
El vuelo se realiza en posición tumbado boca abajo, no te preocupes, vas sujeto por un arnés por lo que resulta muy cómodo.
Para volar dependemos de las condiciones meteorológicas, el ala delta necesita corrientes térmicas o una ladera para poder mantenerse en vuelo, es tal y como vuelan los pájaros, por ello este deporte es lo más parecido a volar como lo hacen los pájaros.
Por último queda aterrizar, que pena que ya se acaba la actividad. Lo habitual en ala delta tandem es aterrizar sobre unas ruedas en la estructura del ala delta.
El aterrizaje se puede hacer corriendo o en algunos casos se instalan ruedas en la estructura para tomar tierra tumbados.
¿Qué diferencia hay entre ala delta y parapente?
Es muy común confundir ambos deportes aéreos ya que se vuelan con condiciones similares, siempre asemejando el vuelo libre y el vuelo con motor en ambas modalidades.
La principal diferencia es la aeronave, en el ala delta es rígida, mientras que el parapente es un "trozo de tela". Para que os hagáis a la idea, el parapente entra en una mochila grande.
En cuanto a la actividad, ambos son muy parecidos, los dos te acercan al vuelo libre, a sentir lo que es volar como un pájaro.
¿Dónde puedo volar en ala delta en España?
En España hay muchas zonas de vuelo en ala delta, cada una de ellas es espectacular y única, con un entorno natural envidiable, lleno de fauna y naturaleza que a vista de pájaro enamora a todo el mundo. A continuación os contamos unas pinceladas de cada una de las zonas de vuelo en ala delta que podemos encontrar en España.
Ala delta en Madrid
Vamos a empezar por la capital y es que cada vez están más demandados los deportes en la naturaleza, hacer una escapada de la ciudad al campo para disfrutar de unas horas de relax.
Lo más curioso es que en Madrid en realidad no se vuela en ala delta pero podemos disfrutar de esta actividad en las provincias cercanas, algunas a menos de una hora en coche desde Madrid centro como puede ser La Muela, en Guadalajara, un cerro con encanto, sobre todo en sus atardeceres.
Ala delta en Segovia
Otra ubicación espectacular para hacer ala delta en España es en Arcones, Segovia.
Con este vuelo conoceremos la cara norte de la sierra de Guadarrama, un vuelo apasionante a través de sus más de 20 kilómetros de ladera. Es una zona habitadas por buitres, es muy fácil verlos de cerca y compartir el vuelo con ellos.
Ala delta en Cataluña
La zona de vuelo más conocida es en Ager, Lleida. Es la meca del parapente y del ala delta en Cataluña.
El vuelo se desarrolla en un entorno natural único, parque natural del Montsec, el congost de Mont-Rebei, los pantanos de Canelles y Camarasa. Tendrás un asiento en primera fila al Pirineo.
Además de este paisaje espectacular viviremos la experiencia de estar a más de 1000 metros de desnivel.
Ala delta en Castellón
Este vuelo en ala delta se realiza en la playa del Pinar, en Castellón de la Plana.
Es muy bonito volar junto al mar, con sus playas, barcos, gaviotas...además este vuelo en ala delta nos permite ver mar, cuidad y montaña a la vez.
historia del ala delta
Abbás Ibn Firnás fue un soñador que como muchos de nosotros soñaba con volar, así que en el año 875 y con 65 años diseñó unas alas de madera recubiertas con tela. Se lanzó desde una torre y su vuelo fue considerado un éxito porque planeó unos segundos, aunque se fracturó las dos piernas en el aterrizaje.
Anteriormente, en el 852, se lanzó con una lona para amortiguar la caída y es por eso que se le considera el inventor de lo que hoy conocemos por paracaídas.
Más de 1000 años después, en 1948 Francis Rogallo, ingeniero de la NASA, inventó el ala Rogallo que posteriormente la NASA investigó en la búsqueda de un paracaídas dirigible.
En 1963 John Dickenson hizo la adaptación con más éxito y fue entonces cuando se comenzó a usar por ocio, haciendo del ala delta un deporte de competición.
A continuación os dejamos algunos vídeos muy curiosos sobre los primeros modelos de ala delta, nuestros antecesores fueron muy valientes ya que el éxito no estaba asegurado al lanzarse con un modelo de ala delta recién construido.
Tenemos mucho que agradecer ya que hoy podemos volar gracias a estos genios.
Cada vez son menos los pilotos de ala delta que quedan, la mayoría prefieren el parapente. Para algunos es más cómodo transportar su aeronave en una mochila a la espalda y es que el parapente es una tela que se puede doblar mientras que para transportar un ala delta se requiere de un vehículo especialmente adaptado además de un trastero o garaje donde guardarlo mientras no lo usas.
Para otros sencillamente es un deporte más seguro en cuanto a aterrizaje se refiere ya que en el parapente se aterriza a menor velocidad.
Por ello hoy en día hay muy poquitos profesionales que se atrevan a hacer los vuelos en tándem en ala delta, eso sí, los que hay son muy buenos.
Por ello es posible que hacer un vuelo en ala delta en España pueda resultar complicado, os recomendamos probar el parapente o el paramotor. Son actividades similares.
Realmente lo único que necesitas es tener muchas ganas de divertirte y disfrutar de la experiencia de volar como un pájaro. Esta actividad no requiere experiencia previa, siempre irás acompañado de un piloto profesional.
Para realizar la actividad es necesario ir con ropa cómoda, como si fueses a ir a dar un paseo a la montaña, en invierno bien abrigado y en verano con una sudadera puede ser suficiente.
Es preferible hacer la actividad con gafas de sol, el sol puede ser muy molesto pero además nos quitará viento o incluso evitará que algún bicho nos entre en el ojo.
La mejor época del año para volar en ala delta en España es ¡cualquiera!, es una actividad disponible durante todo el año, lo único a tener en cuenta son las condiciones meteorológicas y eso nos lo dirá el piloto. Por ejemplo si llueve o hace mucho viento no podemos volar.
También hay que tener en cuenta que en invierno hace más frío, por lo que con abrigarse más es suficiente.